¿Qué pasará con el euro? Una perspectiva económica
En el contexto de la desdolarización gradual del sistema económico mundial, se plantea cada vez más la cuestión de la sustitución de la moneda nacional estadounidense. Algunos expertos ya han empezado a hablar del euro como sustituto. Esto es poco probable, sobre todo con la configuración económica y geopolítica de la Unión Europea (UE), que ahora está presente en la escena mundial. ¿Qué pasa con la UE y qué destino le espera al euro? Abordaremos esto en nuestro artículo de hoy.
Tú mueres hoy, yo moriré mañana
En la novela "Archipiélago Gulag", del escritor ruso Aleksandr Solzhenitsyn, aparece a menudo la frase "Tú mueres hoy y yo moriré mañana". Describe bastante bien la relación entre el "policía del mundo", Estados Unidos; su moneda de reserva mundial, el dólar, y los principales satélites de Estados Unidos, los países de la Unión Europea.
En el modelo económico moderno centrado en el dólar, la cura para cualquier enfermedad (crisis financiera) consiste en inyectar liquidez adicional al mercado.
Un ejemplo de este "tratamiento" puede verse en las tres últimas crisis significativas por las que ha pasado la economía moderna, que quizás te resulten familiares.
La crisis de las hipotecas de alto riesgo de 2008
Tras haber provocado la formación de una burbuja masiva en el mercado inmobiliario a través de la emisión descontrolada de derivados, Estados Unidos aumentó la masa monetaria de forma drástica (la masa monetaria M2 "saltó" al alza a principios de 2008 y 2009). Al mismo tiempo, inició un largo ciclo de reducciones del tipo de interés de referencia, llevándolo casi a cero.
Teniendo en cuenta que Estados Unidos es un importador neto, esto, a su vez, desencadenó una reducción gradual del tipo de interés de referencia en la propia Unión Europea hasta el 1% y una devaluación gradual del euro frente al dólar (el valor máximo de 1.6038 del par EURUSD se alcanzó en 2008).
La falta de una alternativa al dólar provocó un fuerte aumento de las inversiones en bonos del Tesoro de Estados Unidos (es decir, deuda estadounidense). Asimismo, antes de la crisis de las hipotecas de alto riesgo, la relación deuda/PIB no superaba el 70%. Después de 2009, esta misma saltó al 82% y siguió creciendo.
Crisis del covid-19
Estados Unidos siguió el mismo camino, pero esta vez fue más agresivo, inyectando más de 4.5 billones de dólares en el sistema. Tras el ciclo de 4 años de alza de la tasa, volvió a bajar de forma abrupta. Para entonces, la economía de la Unión Europea ya no tenía margen de maniobra en cuanto al tipo de interés de referencia. Desde 2008, la UE apenas detuvo su ciclo bajista, y en este punto, el euro se había devaluado un 16.3% frente al dólar estadounidense.
Crisis de 2022
La pandemia no terminó antes de la crisis de 2022, que comenzó con el conflicto entre Rusia y Ucrania. Esta crisis destapó problemas bastante aparentes que no se habían podido abordar antes. En cambio, solo se habían acumulado con el tiempo. En primer lugar, se trata de un problema de recursos energéticos baratos en el que se basaba la baja inflación de las economías desarrolladas. Esto, a su vez, permitió mantener tasas bajas y no esterilizar la liquidez acumulada en el sistema durante mucho tiempo. En segundo lugar, China y, en parte, India han ganado fuerza y son ahora los principales actores en la arena geopolítica, lo que supone una amenaza para el dominio de Estados Unidos y, en consecuencia, para la supremacía del dólar estadounidense.
La cuestión de la supervivencia de Estados Unidos en esta situación pasa por unir fuerzas con sus principales aliados de la Unión Europea y utilizar sus economías para garantizar su sostenibilidad. Se presume que Estados Unidos es consciente de que ya se está produciendo una "redistribución mundial" y se limita a intentar adoptar la posición geopolítica y económica más favorable a largo plazo.
La Unión Europea y el euro pueden desempeñar un papel bastante secundario en esta situación. Con sus acciones contra uno de los principales proveedores de energía de la Unión Europea, Rusia, los políticos europeos confirmaron su adhesión a los principios del mercado estadounidense. En contra de la negativa a comprar energía a Rusia, el mercado de la Unión Europea ha pasado a estar totalmente controlado por las compañías petroleras estadounidenses, lo que demuestra un aumento masivo de las ganancias. En 2022, los ingresos de Exxon Mobil crecieron más de un 40%; los de Chevron, un 57%, y los de Shell, casi un 46%.
A esto se refiere la frase: "Tú mueres hoy y yo moriré mañana".
¿Qué sucede con la Unión Europea?
¿Por qué la Unión Europea y su moneda no pueden desafiar a Estados Unidos? Dejemos de lado los aspectos geopolíticos y las características personales de los políticos europeos, y vamos a centrarnos solo en el componente económico. Entonces, la respuesta es muy sencilla: la heterogeneidad de las economías.
Durante 40 años, la Unión Europea ha estado tan concentrada en la expansión de sus fronteras y en la integración, que las cuestiones económicas han sido dejadas de lado. Al mismo tiempo, si observamos el PIB de los 27 países de la Unión Europea, el panorama es el siguiente:
La diferencia entre la primera economía de la Unión Europea (Alemania) y la segunda (Francia) rondaba el 50% en 2021. Si comparamos Alemania, por ejemplo, con Grecia, la diferencia es de unas 20 veces. La relación deuda/PIB actual de Alemania es del 66.3%, mientras que la de Grecia es del 171.4%. La relación en España (que no es la economía más pequeña de la Unión Europea) es del 113.2%. En otras palabras, la frase "el burgués alemán lo paga todo" no es descabellada. De hecho, es un factor.
También está la deuda de Estados Unidos con la Unión Europea. En conjunto, la Unión Europea posee alrededor de 1:15 de la deuda exterior estadounidense. El banquero Jean Paul Getty solía decir que "si le debes $100 al banco, ese es tu problema. Si le debes al banco $100,000,000, es problema del banco". Esto es totalmente aplicable a Estados Unidos, donde la Unión Europea actúa como el banco. El problema de la crisis actual es que, por un lado, Estados Unidos no puede permitirse no subir el tipo de interés de referencia porque la inflación se aceleraría. Por otro lado, al subir demasiado la tasa, Estados Unidos aumenta el costo del servicio de su deuda, con lo que aumenta el déficit presupuestario. ¿De dónde sacar el dinero para cubrir el déficit? Exacto: emitiendo más bonos del Tesoro y vendiéndolos a sus aliados.
A medida que el sistema económico se desfragmente, comenzará una redistribución gradual de los principales titulares de deuda estadounidense. La consecuencia será un aumento de la deuda de Estados Unidos con la Unión Europea, lo que debería perjudicar al EURUSD.
Análisis técnico
Técnicamente, el EURUSD se encuentra en una tendencia bajista global. La línea de tendencia se dirige hacia abajo, y todas las medias móviles también están cayendo.
El movimiento de los últimos ocho meses puede considerarse una corrección. El precio rompió el nivel de corrección de Fibonacci del 50% y casi alcanzó 1.2226 (el 61.8% de la corrección de Fibonacci).
Con una mayor probabilidad, el precio seguirá cayendo.
Conclusión: panorama del EURUSD
Ahora, veamos dos posibles escenarios globales, ambos desfavorables para el euro.
Escenario 1. Aún mayor integración de Estados Unidos y la Unión Europea.
En este escenario, es posible que aumente el endeudamiento de los países de la Unión Europea; es decir, que aumente aún más la dependencia de la economía europea con respecto a la estadounidense.
Escenario 2. Desintegración de algunos países de la Unión Europea. Desintegración parcial de la Unión Europea.
Este escenario solo es posible si se produce una gran crisis política interna en determinados países del bloque europeo y si Estados Unidos "libera" a ese "rebelde" de su influencia. Este camino es poco probable, pero aún posible en un futuro muy lejano.